sábado, 31 de enero de 2015

EL LIBRO AZUL DE LOS SHADOW


El libro azul de los Shadow

Capitulo 1

     Todo comenzó una cálida mañana de verano. Erik un chico de 16 años caminaba por las estrechas calles de su ciudad. De vez en cuando echaba alguna ojeada a los escaparates de algunas de las tiendas. Llegó a un pequeño parque y se sentó en un banco a esperar a su amigo Alejandro. Alejandro era un chico un tanto extraño, y a pesar de que Erik y el se lo contaban todo, Erik tenia la impresión de que le ocultaba algo. Erik esperó y esperó pero Alejandro no aparecía por ningún lado así que Erik cansado de esperar regresó a casa. Por el camino un hombre se chocó con él y a Erik se le cayó el móvil.

      -¡Oiga! ¡Mire por donde va!-grito Erik.

     El hombre lo ignoró y continuó su camino. Erik se agachó para coger su móvil y, a apenas unos centímetros de el halló un anillo. Era de plata y alrededor de este habían unas letras escritas en un idioma que el no conocía. Lo recogió y se lo colocó en el dedo indice. Unos minutos después llegó a su casa. Erik no tenia padres, vivía con su tío Vicente. Su tío era un hombre muy bueno y Erik disfrutaba de su compañía a pesar de que solía estar gran parte día fuera trabajando. Subió las escaleras y entro en su habitación. Encima de la cama había un paquete con un lazo rojo. En la etiqueta Erik leyó su nombre por lo que lo abrió con mucha ilusión. Dentro encontró un libro. Era antiguo y no llevaba titulo. A Erik no le gusto el libro así que lo dejó en la estantería de cualquier manera, y a continuación se tumbó en la cama. Como estaba agotado enseguida se quedo dormido. Despertó ya bien entrada la noche. Escuchó los ronquidos de su tío por lo que supuso que había decidido no molestarlo. Se incorporó medio dormido todavía y se asomó a la ventana. Las farolas iluminaban la calle y la luna y las estrellas iluminaban el cielo. Había poca luz pero distinguió una sombra en la oscuridad. Se vistió a toda prisa y salió fuera para ver de quien se trataba. No vio a nadie pero escucho una voz ronca que repetía una y otra vez:

    -¡El libro! ¡El libro! ¡Dame el libro!

    -¿Quien esta ahí?-preguntó Erik con un hilo de voz.

     Nadie le respondió, al cabo de un rato volvió a escuchar la voz, esta vez cargada de furia.

    -¡Dame el libro de una maldita vez!

    -¿Que libro?, yo no tengo ningún libro, no me gustan.

    -Te arrepentirás de esto Erik Shadow. Ya lo creo.

    Luego la voz desapareció. Erik entró corriendo a casa y cerró la puerta. Subió corriendo a su habitación y se acostó. Aquella noche Erik tuvo un montón de pesadillas. Cuando despertó con los primeros rayos de sol bajó al salón y encontró a su tío muerto. Rápidamente llamó a la Policía y a Tashia su hermana. Tashia llegó por la tarde. Ambos eran huérfanos. Tashia había logrado entrar en una Academia muy buena gracias a una beca. Y allí era donde estudiaba y vivía. Erik también había hecho el exámen para que le dieran la beca y así poder entrar en la academia junto a su hermana, pero no aprobó, así que Erik se fue a vivir con su tío Vicente que ahora estaba muerto y Tashia un año menor que el logró entrar con la máxima nota.

    -Hola hermanito! -dijo Tashia- ¿Que ha pasado aquí?, ¿Por que necesitabas que viniera? ,¿Que hacen esos policías aquí?, y ¿Donde esta el tío?

    Erik le contó lo sucedido.

    -¿Que libro quería el hombre de anoche?

    -No tengo ni idea, además solo oí su voz, no llegué a verlo.

    Entonces Erik se acordó del extraño libro que había encontrado en su mesa el día anterior.
    ¡Rápido Tash ven!

    Los dos hermanos subieron a la habitación de Erik. Erik cogió un libro bastante viejo de la estantería y se lo mostró a su hermana.

    -Puede que buscase este.

    -¿Hace cuanto que tienes el libro?

    -No mucho, lo encontré ayer encima de la mesa. Pensé que seria un regalo del tío Vicente.

    -Déjame ver- dijo Tashi alargando la mano hasta coger el libro.

    Era cierto que el simple hecho de que no tuviera titulo resultaba extraño. Tashia abrió el libro y vio asombrada que en el solo había escrito una palabra en un idioma que ellos no conocían.
    
     Las demás páginas de el libro estaban totalmente en blanco.

    -Estos símbolos...me resultan familiares, a ti no?-preguntó Tashia.

    -Creo que no.

    -Sujeta el libro un momento- le dijo Tashia dándole el libro.

    Después la joven se quitó un brazalete plateado que llevaba puesto en la muñeca.

    -Mira! Tiene los mismos símbolos que en el libro.

    Entonces Erik se acordó del anillo que había encontrado.

    -Tashia en este anillo también lo pone.

    -Es verdad! Pero tenemos que averiguar que significa.

   -¿En que idioma crees que esta escrito?-No lo se creo que no es un idioma, si no una clave, si la conseguimos descifrar encontraremos el sigificado.

   -Mira Tashia los símbolos representan objetos, quizá si colocamos la letra inicial de cada palabra lograremos averiguar su significado.

     -Puede ser, vamos a probarlo.

    El primer símbolo que había era un walkitalki por lo que los chicos le asignaron la letra w. El segundo era un animal, un oso así que le pusieron la letra o. el tercero era un dado y le pusieron la letra d. el cuarto era una ancla que se quedo con la letra a. el quinto era un hueso por lo que le pusieron la letra h. el ultimo símbolo era una serpiente a la cual le asignaron la letra s. siguiendo este procedimiento les había quedado la palabra “WODAHS”.

   -Eso no significa nada, parece que mi idea no ha servido de nada-refunfuñó Erik.

   -No te preocupes, al menos lo hemos intentado.

   Tashia volvió a mirar el libro con atención.

   -¿te das cuenta?

   -¿de que?- pregunto Erik.

  -Para saber de que objeto o animal se trataba cada símbolo tuvimos que darle la vuelta al libro, es como si alguien lo hiciera aposta, pero...para que?

   -no tengo ni idea. A lo mejor el que lo escribió estaba loco y escribía las cosas al revés.

   -¡Eso es!- exclamó Tashia- ¡al revés!

   -¿que dices?

  -No lo entiendes? Es muy sencillo, solo hay que girar la palabra, es decir, leerla al revés.

 Shadow- murmuró Tashia-Shadow nuestro apellido es la palabra correcta!

   -Y por que pone eso en el libro?

   -No lo se, quizás porque el libro perteneció a un familiar nuestro al igual que mi brazalete y tu anillo. Por cierto ¿ de donde has sacado el anillo?

   -De una chistera- bromeó Erik- lo encontré ayer, en el suelo de la calle.

   -¿Y que demonios hacia allí?

   -Eso mismo me preguntaba yo.

   -En fin, lo importante es que ahora lo tienes tu.

  -Tash creo que por el momento no deberíamos compartir esta información con nadie ¿de acuerdo?

    Tashia asintió en silencio.

  -Erik una cosa... si Vicente a muerto...ya no nos queda familia. ¿te das cuenta de la gravedad de eso?

 -Quien sabe, puede que tengamos familia en alguna parte del mundo que aun no hemos conocido.

  -Si pero, te das cuenta de que todos los familiares que conocimos están muertos?

  -Quieres decir que puede que nosotros seamos los siguientes?

  -Espero que no, pero lo importante ahora es bucarte un hogar, no pienso dejarte aquí solo.

 -No te preocupes por mi, soy mayor que tu y se cuidarme solo. Sigo yendo a karate recuerdas? Se defenderme, estaré bien.

  -Vale, pero ten cuidado.

   Poco después Tashia regresó a la Academia.


Stella.
https://enellaberintodelavida.wordpress.com/page/2/ 

jueves, 29 de enero de 2015

UN PORTAL CAP A LA VALL DELS LLOPS


UN PORTAL CAP A LA VALL DELS LLOPS






UN PORTAL CAP A LA VALL DELS LLOPS
     Tot va començar un dimecres pel matí.Jo acabava de tornar de l’institut i em vaig assabentar de què a la finca on visc s’acabava de mudar una científica molt famosa.El seu nom era Sarah Packerman.Per la vesprada vaig anar a conéixer-la.Aleshores vaig tocar a la porta 31.Em va obrir una dona d’uns 34 anys, alta i amb el cabell castany fosc.Els seus ulls de color entre àmbar i daurat brillaven en la penombra de l’habitació. Només veure’ls em va donar un calfred.
     -Hola -vaig dir -em dic Anna.
     -Bona vesprada, jo sóc Sarah- em va dir la jove.
     -Jo visc ací i volia conéixer-la.
     -Molt bé, però hui estic molt ocupada.
     -Per qué?- vaig preguntar.
     -Xiqueta, fes moltes preguntes, estic treballant en un nou invent que, pot ser canviarà el món per a sempre.
     -De veres? Que divertit! De què es tracta? Puc ajudar-la?
    -Donç no, voste és només una xiqueta, no podries entendre el que vuic fer-va replicar Sarah.

     Després Sarah em va tancar la porta davant els meus nassos sense acomiadar-se.Torné a ma casa un poc decebuda. Al dia següent quan vaig tornar de l'institut vaig passar per la seva porta i vaig decidir parlar amb ella. Però ningú em va obrir. Quan anava a marxarme vaig ensopegar amb el pelut i em vaig caure. Darrere del pelut va quedar descoberta la clau de la casa de sarah. Aleshores vaig obrir y passe al interior. Dins hi habia molt de fum. Despres d'obrir les finestres per a que el fum isca fora vi en una paret al costat de la porta que donava a la altra habitació un artefacte molt estrany. Pareixia una espècie de portal. Damunt de la taula hi havia un muntó del papers amb càlculs matemàtics i coordenades. Aço només podia significar que sarah havia viatjat a algún lloc amb aquell portal però...on? i...per que? Segons les coordenades la cientifica havia anat al passat a l'any 1987. despres de fer un rapid càlcul vaig deduir que més o menys en aquell any Sarah deuria tindre set o huit anys. De repent el portal es va il·luminar. No m'ho vaig pensar dues vegades, em vaig llançar al seu interior. Quan torne a obrir el ulls em trobava en un xicotet laboratori. La porta estava oberta i decidi eixir. Fora nomes hi havia un bosc. Mes enllà dels arbres es podia distinguir una petita aldea. 

     Després d'atravessar el bosc a gran velocitat vaig arribar a l'aldea.hi havia un cartel molt gran que deia “Vall Dels Llops”. A pocs metres del cartell hi havia un home amb el cabell negre i una mirada molt siniestra.
     -Hola-li vaig dir- sóc nova per ací, estava buscant a una amiga, el seu nom és Sarah. Crec que viu per ací. La coneix?
     -Hola, clar que si, fa ja una estona desde què se'n va anar al laboratori del pare de joan. No tardarà en tornar.
     -Però...jo acabe de tornar del laboratori i allí no hi havia ningú.
     -Oh donç aleshores no tinc ni idea d'on pot estar.
     -Val, igualment gràcies.

      En observar el cel em vaig adonar de què era de nit i que la lluna estaba plena. De sobte es va escoltar l'udol d'un llop. Més enllà es podia distinguir un riu. Així que vaig començar a recórrer el riu per la vorera. Els arbres del bosc continuaven per allí. Després d'una estona caminant escolté una veu que provenia de darrere dels arbres. Em vaig acostar i vaig veure una xiqueta d'ulls blaus i cabell marrò fosc. Era molt pareguda a sarah. La xiqueta cantava una cançó molt dolça mentres arreplegava flors. En aquell moment de darrere dels arbres va apareixer un llop negre massa gran. La xiqueta es va esglaiar i va retrocedir fins que els arbres li tallaren el pas. El llop es va llançar damunt d'ella. La xiqueta va cridar. Els moments següents van ser molt confussos. El llop va mossegar la mà de la xiqueta i després es va anar correguent per la espesura del frondós bosc. La xiqueta aturdida va caure al sol. Jo no sabia si aproparme o esperar a que la xiqueta fera algo. Quan apenes havia donat un parell de passos va aparéixer Sarah Packerman.

     -Sarah!- vaig exclamar tot contenta.
     -Oh no, he tornat a arribar tard-murmuraba sarah.
     -Tard? Què vols dir?

     A Sarah no li va donar temps per a respondre´m. La xiqueta a la que el llop havia atacat estaba transformantse en un...llop!

     -Que li passa?-cride presa del panic
     -Corre!-digué sarah
     -Què?! No...però...jo...
     -Que córregues!- cridò Sarah

     En aquell mateix moment la xiqueta acababa de transformarse en un llop marró. Només era una cria. Però era molt gran. Massa gran. Vaig començar a correr. Pero abans vaig mirar altra vegada a sarah. La científica s'havia assegut en una roca amb els seus ulls ambarins fixes en la lluna que emitia una lluenta molt estranya. De sobte sarah va udolar. Vaig córrer amb mes velocitat. El llop, es a dir, la xiqueta de les flors em perseguia transformada en aquella bèstia. Pareixia disposta a matarme. Per fi vaig arribar al laboratori on estaba el portal.-estic a salv-pensé. Però una vegada més estava equivocada. El portal estava desactivat i jo no sabia quines eren les coordenades per a tornar a activarlo. La xiqueta-llop va entrar dins del laboratori darrere de mi. Es va llançar damunt meu. Jo vaig perdre l'equilibri i em vaig caure. Aleshores vi en un racó del laboratori una espasa. Pareixia de plata. En molts llibres dels que havia llegit deien que els licantrops o lo que foren aquelles criatures semihumanes que adoptaven la forma d'una bèstia les nits de lluna plena temien a la plata. Em vaig lliurar de la lloba i agafe l'espasa. En cuant la lloba va veure l'espasa va donar uns pasos enrrere. -ja està-pensé- ara només he de buscar Sarah i...La lloba no es va redir tan fàcilment. Va tornar a atacarme. Desenvainé l'espasa i li vaig llançar una estocada en el musle dret. La cratura va grunyir. Aquell golp podia ser mortal. La seua carn del musle va començar a cremarse com si li haguera possat a la pell un àcid. Em vaig apropar un poc més per a matar definitivament a la bèstia quan esta es va transformar de nou en una xiqueta de cabell castany. Els seus ulls que abans habien sigut blaus eren ara ambarins exactament com els de Sarah, de sobte vaig comprendre moltes coses. A pesar de que els seus ulls habien canviat em va mirar amb llàstima amb compasió pero sobretot amb una mirada totalment humana. No podia matarla. A soles era una xiqueta. Vaig sentir molta llàstima. Aquelles persones no controlaven els seus actes les nits de lluna plena. La seua conciència només pensava en alimentarse de sang humana. Entendí que de alguna forma la ment del llop i la del humà no s'uneixen en una sola, si no que la ment del llop a soles desperta les nits de lluna plena. La ferida de la xiqueta sangraba molt.-no sobreviura durant molt de temps més-pensé apenada-que he fet...oh que he fet. La porta es va obrir i va entrar sarah.

     -Has d'anarte -va dir molt sèria.
     -Però ella...és a dir tu...estàs a punt de morir.
    -Això no és veritat ella sobreviurà. A soles li quedarà una cicatriu molt lletja. No veus que estic aci ara?

     -Hi ha lluna plena. Com es que no et transformes en un licantrop?
   -Donç perquè ella i jo som la mateixa persona. Si ella utilitza la part de llop jo utilitze la humana.
     -Volies impedir açò veritat?
     Un udol va rasgar la nit i va interrompre la conversació.
     -Has d'anarte'n ara mateix
     -Què ha sigut açò?
     -És clar que un udol. El mateix licantrop que em va mosegar. Aquell llop negre.
     -Aixi que ell també era un licantrop?
     -Obviament si no ho fora no seria aixi ara mateix. Crec que esta buscante. Has d'anar-te´n.
     -El portal està desactivat.
   -Jo sé les coordenades per a tornar-lo activar. Ix fora i distrau al licantrop. jo mentres reactivaré el portal.

     Una vegada més vaig fer cas Sarah. Desenvainé l'espasa i eixí fora. El bosc era encara més fosc i tenebrós que abans. A lo lluny distinguí una sombra amb uns grans dents i una mirada molt siniestra que corria fins a mi. Aquella mirada em resultaba familiar. El licantrop el llançà amunt meu amb les fauces obertes. Però, abans de que puguera alcanzarme em vaig apartar i es va estrellar amb la porta del laboratori. De prop semblava més gran i perillós. Va correr fins a mi i em va acorralar. Quan el licantrop anava a saltar altra vegada damunt meu, una dona amb el cabell castany clar li va incar un ganibet en el vientre. Era sarah. De sobte el licantrop va adoptar una forma humana. Llavors el vaig reconeixer. Era l'home que havia trobat en el poble quan buscava a Sarah.

     -El portal esta obert-em digué sarah- fins prompte.

     Em vaig acomiadar d'ella i vaig creuar el portal de volta a casa. Abans de què el portal es tancara del tot vaig veure un licantrop marró que em va mirar i va soltar un poderós udol.
    Stella
    https://enellaberintodelavida.wordpress.com/page/2/ 

CAPERUCITA ROJA

CAPERUCITA ROJA

Hola soy lobo.

Todo comenzó cuando me encontré con aquella criatura. Era verano, caminaba por el bosque en busca de alguna presa que devorar, entonces la encontré. No era la primera vez que nos veíamos, por eso la reconocí. Llevaba aquella caperuza roja que tanto la distinguía de las demás niñas. Iba con aquella cesta como todos los días a casa de su abuela. Su abuela vivía en un palacio de hielo en el polo norte. La niña se dirigía a las montañas. Me quedé paralizado de terror. Nunca había visto un ser como aquel. Era una niña horrenda. Sus ropas estaban rotas como si hubiera sufrido una transformación hace poco. Después la perdí de vista, desapareció, se volatilizó. No volví a verla, pero notaba su olor. Era como si de repente se hubiera vuelto invisible. Luego la volví a encontrar pero había recuperado su belleza y sus ropas estaban perfectas.

 ¿Qué había pasado? 

No encontraba ninguna respuesta que fuera lógica. Pero no me rendí. Por lo que decidí seguirla. Como antes dije Caperucita de dirigía a las montañas en busca del palacio de su abuela. Se movía ligera entre los arboles ya que había hecho ese recorrido varias veces. En cambio yo me movía con la agilidad de un pingüino cojo. Tiempo después llegamos a las montañas. Noté que el clima había cambiado. De repente empezó a hacer muchísimo frio. Una ventisca de aire helado me golpeaba con violencia. En un par de ocasiones estuve a punto de caerme pero continué persiguiendo a aquella chiquilla. Después de unos minutos que me parecieron eternos la ventisca amainó y pude continuar caminando con más velocidad. 

Hacía un buen rato que había perdido el rastro de la joven pero su olor y su alma se podían percibir con facilidad. Apenas había dado un par de pasos cuando distinguí un objeto rojo en la nieve. Me acerqué para averiguar de qué se trataba. Cuando vi lo que era se me congelo la sangre. Era la caperuza roja de caperucita. La recogí y me la llevé al hocico para olerla. Aquel olor que olfateé me recordó al día en que nos vimos por primera vez. 

Apenas haría catorce años. Yo acababa de cumplir los dieciocho y paseando por el bosque me perdí. Intenté buscar el camino de vuelta a mi cueva pero no lo encontré. Así que decidí continuar andando haber si lograba orientarme. 

Encontré una cabaña de madera. La ventana lateral estaba abierta de par en par y decidí asomarme. Así lo hice. Asomé mi hocico por la enorme ventana y vi una cuna, dentro de la cuna había un hermoso bebé. Era una niña un poco pelona pero tenía  algunos mechones castaños. Vestía un gracioso peto rojo. Me acerqué a ella para observarla más detenidamente y me dejé llevar. Antes de que pudiera darme cuenta había mordido uno de sus blanditos y suaves brazos. La niña comenzó a llorar. Rápidamente escapé de allí. 

Hasta hacia unos pocos días no había vuelto a verla. En algunas ocasiones fui a la biblioteca del pueblo y leí sobre los síntomas que podría causar un mordisco de lobo, pero no encontré nada. Hasta día de hoy había pensado que la licantropía no existía pero pronto descubrí que me equivocaba. Como iba diciendo olisqueé su caperuza y continué tras ella. Pronto encontré el palacio. Era precioso. Estaba completamente hecho de hielo. La puerta principal estaba abierta así que entré. Recorrí todo el palacio pero allí no había nadie, aquello estaba desierto. 

Finalmente subí por las escaleras a la planta superior. Había una puerta que estaba abierta. Me asomé y cuando lo hice estuve a punto de desmayarme. Allí encontré una anciana de pelo grisáceo que yacía muerta en el suelo. Me arme de valor y inspeccioné su cuerpo inerte. Alrededor de su cuello había una mordida de lobo. 

La ventana estaba abierta. Con mucha cautela me asomé. Y allí abajo vi una loba salvaje que corría por la nieve con una caperuza roja. Entonces comprendí que el lobo que había estado tantos años en el cuerpo de caperucita roja por fin había despertado.
                                                                     



                                                                          Stella
https://enellaberintodelavida.wordpress.com/page/2/ 

miércoles, 17 de diciembre de 2014

EL REINO DE PLATA


EL REINO DE PLATA

INDICE:    
CAPITULO 1: Miele.
CAPITULO 2: El Sueño.
CAPITULO 3: La Foto.
CAPITULO 4: El Símbolo.
CAPITULO 5: El Viaje.
CAPITULO 6: En El Reino.
CAPITULO 7: La Fuente.
CAPITULO 8: El Palacio.
CAPITULO 9: La Misión.
CAPITULO 10: En El Bosque.
CAPITULO 11: Los Cuervos.
CAPITULO 12: El Lago.
CAPITULO 13: El Plan.
CAPITULO 14: La Fiesta.
CAPITULO 15: Regreso a Casa.

CAPITULO 1:  Miele.
Hola mi nombre es Miele  y tengo 13 años. Muchos os preguntareis que porque me llamo Miele, es por la sencilla razón de que mi pelo es rubio de un color muy parecido a la miel y de ahí viene mi nombre, todo comenzó el primer día de instituto, me levante temprano y fui a recoger a mi mejor amiga Elena, somos amigas desde los 4 años, nos fuimos juntas a el instituto, al principio nos daba mucha vergüenza entrar pero al final nos armamos de valor y entramos.
Dentro todo el mundo era muy grande y nos daba miedo pero con el tiempo nos fuimos acostumbrando, como iba diciendo fuimos a la sala de actos para que nos dijeran a que clase iríamos, nos toco la B 15.Pasamos bien el día y luego nos fuimos a nuestras casas.
A mí me encanta la noche y sobre todo dormir porque sueño unas cosas superultramegachulas, lo malo es que a la noche siguiente ya no me acuerdo de nada y luego sueño algo nuevo y así sucesivamente, pero esa noche tuve el sueño más raro que hasta ahora había tenido. Soñé que la biblioteca era mágica y que pronunciando unas palabras mágicas podías viajar a un reino llamado El Reino De Plata ya que todo allí estaba hecho de plata, bueno y que yo viajaba allí y tenía que cumplir una misión muy importante porque  la fuente mágica del Reino no tenía agua.

CAPITULO 2:  El sueño.
Aquel sueño fue sin duda uno de los que no pude olvidar al largo del día. Al día siguiente fui a recoger a Elena pero su madre me dijo que se había puesto enferma de modo que me marche yo sola al instituto. Llego la hora del recreo y como no me apetecía salir al patio decidí ir a la biblioteca, la biblioteca estaba vacía ya que nadie la visitaba, se rumoreaba que como la gente no iba  al a biblioteca desde hacía años, la bibliotecaria tuvo  que ser despedida ya que no era justo pagarle el dinero si no hacía nada. Como os contaba entre en la biblioteca, las persianas estaban bajadas y allí no había nadie, subí las persianas y abrí la ventana , cuando lo hice, cogí y me puse a mirar las estanterías y me detuve en una que ponía en el letrero (Pergaminos  mágicos), abrí el cristal que tapaba los libros y me puse a ojearlos rápidamente eran unos libros muy viejos y polvorosos ya que nadie los había leído desde hace muchísimo tiempo, me detuve en uno de ellos; era un libro color plata , quite el broche que lo sujetaba y empecé a ojearlo poco a poco. El libro hablaba de un reino con una fuente mágica en la que si se acababa el agua todos sus habitantes estarían en peligro. De repente entre las páginas del libro se cayó al suelo una fotografía en blanco y negro en la que había una fuente plateada ¡Era la fuente de mi sueño!

CAPITULO 3:  La foto.
Me sorprendí muchísimo cuando vi esa foto y más aun cuando supe que era la de mi sueño. De pronto sonó la alarma de que ya había finalizado el patio, guarde el libro y me guarde la fotografía en mi mochila. Todo seguido me fui a clase. Estuve todo el resto del día meditando sobre lo ocurrido. Hasta que me canse y me fui a dormir, esa noche seguí soñando con aquel sueño tan raro y volví a ver aquella fuente pero no era como la de la foto, la fuente de mi sueño ya no tenía agua. A la mañana siguiente me desperté con ganas de que llegara la hora del recreo y así poder ir a la biblioteca a ordenar mis ideas. Como Elena aun seguía enferma podía ir a la biblioteca y buscar información en los libros y también utilizaría el móvil por si tenía wifi para buscar cosas sobre la misteriosa fuente plateada. Pero en internet no aparecía nada sobre aquella fuente tan misteriosa así que volví a coger el libro plateado. Como era viernes decidí coger el libro prestado para poder ojearlo el fin de semana si tenía tiempo. Antes de llegar a casa decidí ir a visitar a Elena ya que se que le haría mucha ilusión. Me dijo q ya estaba casi recuperada y que el lunes ya podría volver a ir a el instituto. Me despedí de ella y me marche a casa.

CAPITULO 4: El símbolo.
La tarde transcurrió con normalidad. Sin embargo la noche no, esa noche soñé que me pedían ayuda desde aquella fuente pero: ¿Por qué le pedían ayuda a una niña de apenas 14 años? Esa era mi pregunta y también: ¿porque estaba yo teniendo esos sueños tan raros? Y: ¿qué significaba aquella fuente? Tenía muchas preguntas porque ya  todo era muy confuso y no entendía nada, pero los dos últimos días esas preguntas ya no eran el mayor de mis dudas, ahora tenía otras preguntas: ¿existía de verdad ese reino tan misterioso? ¿Podría yo viajar allí? Pero por más que intentaba averiguar alguna respuesta no encontraba ninguna que fuese lógica. Sin apenas darme cuenta transcurrió el fin de semana y llego el lunes. Me desperté tarde y me vestí a toda prisa para ir corriendo a recoger a Elena. Por suerte llegamos justo a tiempo al  insti. Me contuve por no contarle a Elena lo de mis sueños y aquella fuente, aunque fue muy difícil al final lo logre. Luego sin que Elena se diera cuenta fingí ir al baño en mitad de la clase de sociales y fui a devolver el libro a la biblioteca. Como iba corriendo para no tardar mucho me tropecé y caí al suelo. Con dificultad por la poca luz que entraba por la pequeña ventana de la biblioteca vi un extraño símbolo en el suelo, era como una “R” entrelazada con una “P”.

CAPITULO 5:  El viaje.
Ese símbolo era muy raro lo contemple durante un rato hasta que caí en que la imagen que encontré, me acorde de que en aquella imagen estaba la fuente y q en un lado de aquella fuente estaba ese símbolo. Corrí a clase y efectivamente en la fotografía estaba aquel símbolo. Cuando fui a guardar la imagen me di cuenta de una cosa que antes no había visto. En la parte de detrás de la fotografía había como una especie de poema mágico o algo así, que decía:
“Fuente reluciente de plata hecha estás;
Tú agua helada das y cada vez reluces mas;
A tu reino quiero ir 1, 2, 3 cuando abra los ojos;
allí estaré”
Cuando acabaron todas las clases me fui corriendo a casa y, una vez allí leí otra vez aquella poesía mágica. Hablaba de la fuente de plata y de un reino. Aquella noche soñé que si en la biblioteca me ponía encima de aquel extraño símbolo y pronunciaba aquel poema, viajaría al mágico reino del que hablaba la poesía. Al día siguiente espere con mucha ilusión que llegara la hora del recreo para poder intentar lo que en mi sueño vi. Despiste a Elena en el baño y fui a la biblioteca, me puse encima de el símbolo y pronuncie aquella extraña poesía. Conforme la iba pronunciando me di cuenta de que todo a mi alrededor se detenía hasta que de repente escuche un ruido.

CAPITULO 6:  En el reino.
De pronto comencé a escuchar el ruido de pájaros cantando y abrí los ojos. Vi un montón de aves y muchos pájaros cantando. Empecé a andar por el bosque un poco extrañada por aquel lugar y de repente me empezó a parecer que alguien o algo me seguía así que disimuladamente estuve espiando todos los lugares que se movían. No sabía que ser o criatura era exactamente la que me perseguía, pero quería averiguarlo. De pronto salió de un matorral un búho real precioso por sus plumas y por su delicadeza al volar supe que era adulto. El búho se poso en una rama de un árbol y me dijo:
-¿Quién eres?
Yo no sabía muy bien si era el búho real el que me había dicho aquello, pero a pesar  del pánico que tenía logre decir:
-Me llamo Miele tengo 13 años y soy nueva por aquí.
Entonces el búho dijo:
-¿Enserio te llamas Miele?
Yo un poco extrañada por estar hablando con un animal en este caso con un búho le dije q si y el no sé porque se puso muy contento y comenzó a volar a mi alrededor. Y cuando el búho se volvió a posar en la rama le pregunte que si el tenia nombre y él me contesto que sí, me dijo que se llamaba Bruno Del Norte de la dinastía de los búhos reales de el norte futuro rey de los búhos reales y por el momento príncipe. Yo me quede flipando durante unos segundos porque no sabía que los búhos también tuvieran dinastías, reyes, príncipes y todo eso. El me dijo que le siguiera y que no había tiempo que perder. No le dije nada y lo seguí por la espesura del bosque.

CAPITULO 7:  La fuente.
No sé con exactitud el tiempo que estuve caminando pero puede que más de media hora hasta que, por fin Bruno se poso en una rama y dijo:
-Estas en el reino de plata un lugar increíble y mágico y, esta es la fuente de plata, la única fuente de todo el reino y por lo tanto la más importante.
Esa era la fuente de mi sueño y también la de la fotografía y en efectivo tenía el extraño símbolo que, ahora que lo pienso la “R” seria de reino y la “P” seria de plata. El búho continuaba explicándome:
-Hay una leyenda que todos los habitantes conocen que cuenta que hace mucho tiempo el mago que reinaba sobre todo el reino enfermo y  él le tenía mucho cariño a aquella fuente que el mismo creo así que, como el sabia que de un momento a otro moriría decidió morir al lado de la fuente así que Estrellado, que era así como se llamaba el mago, murió abrazado a su fuente y cuenta la leyenda que su cuerpo se fusiono con el de la fuente con un rayo que cayó aquel día y, desde entonces utilizamos esa agua solo para bendecir a un nuevo ser. El padre va a por el agua mientras que la madre se queda con la nueva criatura para poder bendecirla. Pero hace una semana Conejón el rey de los conejos vino a recoger un poco de agua para bendecir a un nuevo ser pero cuando llego vio perplejo que no había agua, y todo el mundo sabe que eso significa que algún ser malvado quiere destruir el reino de plata.

CAPITULO 8:  El palacio.
Cuando Bruno acabo su relato le pregunte que para que me contaba esa leyenda a mí, y él me contesto:
-Porque tú eres Miele la poderosa guerrera que lograra salvar el reino de plata.
-¿Qué? Pero… ¿!como!? ¿Cuándo? ¿Por qué? Yo soy Miele una niña sin experiencia alguna en la lucha ¿Cómo demonios pretendes que salve el reino?
Bruno simplemente me dijo que él era la mascota de su alteza real Miranda y que lo que lo que me había contado lo sabía porque Miranda lo había mandado a buscarme, y que si tenía alguna duda tenía que preguntárselo a ella. Yo le dije que tenía un montón de cosas que preguntarle y entonces Bruno me dijo que él me guiaría hasta ella. Caminamos un largo rato hasta que por fin llegamos a una especie de palacio plateado, el me dijo que llamara a la puerta y yo obedecí. Nos abrió una especie de duende que apenas mediría un metro y medio y se presento soy en gnomo de la guardia real y estoy a su servicio madame, Luego saludo a Bruno y él le dijo quien era yo, le dijo que yo era Miele entonces él se puso muy contento y se fue a avisar a la cocinera para que preparara un té y unas galletitas de jengibre todo seguido fue arriba y les dijo a las amas de casa que resultaban ser hadas que prepararan la habitación de invitados. Todo eso lo hizo en menos de 2 minutos.

CAPITULO 9:  La misión.
Me extraño muchísimo la velocidad con la que aquel ser de menos de metro y medio de altura fue tan rápido, creo que Bruno  se percato de que me había extrañado la velocidad de ese gnomo y me dijo:
-Se llama Rapidín rapidísimo.
Y me guiño un ojo, después me dijo que le siguiera. Me llevo hasta una sala en la que había una gran silla que parecía ser un trono real. Luego me dijo que esperara ahí a que el volviese, una vez más le obedecí, y comencé a dar pasos por la sala ojeando cada rincón y cada cuadro que había en aquella sala tan enorme. Al poco rato regreso Bruno pero no venia solo detrás del, apareció una joven mujer que apenas tendría 30 años. Me miro de arriba abajo y me sonrió, se acerco a mí y me dijo:
-Bienvenida al Reino De Plata Miele.
Su voz tan suave como el algodón y sus gestos tan delicados me invitaron a seguirla hasta una sala más pequeña. Allí me dijo:
-Como ya te habrá explicado Bruno, corremos un grave peligro del que solo tú puedes salvarnos y traer la paz al reino. En primer lugar tendrás que viajar con Bruno a lo más profundo del bosque. Después tendréis que ir al Lago Dorado de donde viene el agua de la fuente de plata. Hasta aquí es fácil pero luego la cosa se complica. Tendréis que derrotar a las sirenas. Son unas especies de humanas con cola de pez que con su canto os pueden hipnotizar que es lo que ha hecho con el cuerpo de la fuente y Estrellado.

CAPITULO 10:  En el bosque.
Me pareció una misión un poco complicada pero a pesar de ello estaba dispuesta a aceptarla mas no quería defraudar a aquel reino. Entonces le dije a Miranda:
-Pero majestad si no me equivoco Estrellado ya no se encuentra entre nosotros.
-Así es Miele pero creemos que al fusionarse con la fuente no murió del todo, es solo lo que creemos no sabemos con seguridad si es verdad o no.
-Y cuando encuentre a las sirenas ¿Cómo podre derrotarlas?
Ella me contesto que tendría que arrebatarle de el cuello una especie de colgante con una concha, también me dijo que las sirenas son tres y que no era necesario  que le quitara el colgante a las tres , porque solo uno , el de la reina es el que ara efecto. Si le quitas el colgante a una sirena que no sea la reina te convertirás en una sirena y ningún antídoto puede hacer nada contra ese hechizo.
-Y ¿Cómo puedo saber cuál de las 3 es la reina?-le pregunte
Querida Miele  me temo que eso no se puede saber con exactitud, pero si crees en ti misma cuando llegue el momento lo conseguirás. Cuando termino de explicarme la misión y resolver mis dudas acepte la misión. Más tarde Bruno y yo nos marchamos hacia el bosque. Una vez llegamos a el interior del bosque Bruno me dijo que había que tener mucho cuidado porque en el bosque viven unos cuervos que son enemigos nuestros, que ayudan a las sirenas transmitiéndoles información de lo que sucede, por eso tenemos que ir con mucho cuidado. Permanecimos un buen rato callados. En aquel bosque había un montón de especies de hojas. Íbamos tranquilamente hasta que de pronto un extraño ruido encima de la copa de un árbol enorme hizo que miráramos arriba.

CAPITULO 11: Los cuervos.            
            -¡PORRAS!- exclamo Bruno
-Están aquí, nos han visto. ¡Corremos un grave peligro!
-¿Quiénes nos han visto?- pregunte yo
-Los cuervos de los que te hablaba, ¡corre! ¡Escondámonos en este arbusto! Puede que con un poco de suerte no te hayan visto a ti.
Hice caso omiso a lo que Bruno me dijo y ambos nos escondimos en el arbusto. Desde nuestro escondite pudimos ver como un cuervo regordete salía de la copa del árbol y, comenzaba a mirar a todas partes buscando algo. Después salió otro cuervo pero delgado que le dijo:
-¿Dónde están?
Y el cuervo regordete le dijo:
-No lo sé, hace un momento estaban aquí pero ahora….
-Sí, pero se te han escapado ¿verdad? ¿ Y qué crees que dirán ahora Merlia ,Marlen y Mirni eh!?  ¡Responde! –le grito el cuervo delgado.
-No lo sé-dijo el cuervo regordete
-¡Rabi eres un desastre!-dijo el cuervo delgado
-Puede que sea un desastre pero tú te quedaste dormido así que tu Paúl, tienes la misma culpa que yo.
Entonces los dos cuervos Rabi y Paul se fueron por el bosque y al cabo de unos minutos desaparecieron. Bruno y yo esperamos un poco más en nuestro escondite hasta que el me afirmo que no había nadie por allí cerca.
-Nos han visto, y probablemente hayan ido a avisar a esas sirenas, tenemos que tener más cuidado –dijo Bruno
Luego ambos seguimos adentrándonos en el oscuro y frio bosque.

CAPITULO 12:  El lago.
Caminamos durante un largo rato hasta que finalmente comenzamos a escuchar el ruido del agua entonces, Bruno dijo que ya estábamos cerca del lago. Aunque Bruno dijera eso todavía tuvimos que estar caminando un buen rato. Más tarde Bruno se subió a un árbol para comprobar si el lago estaba en esa dirección, bajo y me dijo que íbamos por buen camino y que tardaríamos poco en llegar. Cuando llegamos vimos a las tres sirenas que como dijeron Rabi y Paul se llamaban Merlia, Marlen y Mirni .Pero entonces me di cuenta de que eran todas iguales y que solo cambiaba el color de su pelo y de su cola. Nos escondimos detrás de un árbol y de un arbusto y empezamos a espiarlas. Al poco rato vinieron esos dos cuervos y les contaron lo sucedido.
-¡Encontrarlos!-gritaron las tres sirenas.
Después los cuervos se marcharon hacia el bosque refunfuñando. Luego las sirenas empezaron a hablar en otro lenguaje que ni Bruno ni yo entendíamos. Entonces Bruno me susurro al oído:
-¿Qué hacemos ahora?
Yo le dije que por el momento esperaríamos y, que mientras yo pensaría en un plan. Yo no sabía que podía hacer para quitarles el collar y encima ni siquiera sabía quién era la reina y no me quería convertir en una de ellas para siempre. ¿Qué podía hacer?

CAPITULO 13:  El plan.
Seguí pensando pero no se me ocurría nada que yo pudiera hacer. Entonces me fije en que los tres collares eran de perlas y me acorde de que los pendientes que llevaba eran también de perlas y se me ocurrió hacerles una trampa. Me quite los pendientes, se los di a Bruno y le explique el plan. A él le pareció buena idea y entonces comenzamos con ello. Bruno voló y diviso una piedra a unos metros de ellas, con muchísimo sigilo dejo los pendientes en la roca después, yo lancé piedras a el agua justo donde estaba la roca para llamar su atención. Nada mas girarse vio los pendientes y la sirena de color verde cola y pelo marrón se aproximo a ellos entonces, sin pensármelo dos veces corrí a quitarle el collar. No estaba segura de ella seria la reina pero tenía que arriesgarme porque aquel reino dependía de mi. Escuche las voces de las otras dos sirenas que gritaban:
-¡Cuidado Merlia!
Pero cuando Merlia se giro se lo quite. Una luz amarilla ilumino su cuerpo y el de las otras sirenas y estas se convirtieron en pececitos que cayeron en el lago. Me gire mire a Bruno y le dije:
-¡misión cumplida!
  
CAPITULO 14:  La fiesta.
Recogí mis pendientes y me los puse después, Bruno y yo regresamos donde se encontraba la fuente y,  vimos que de ella ya salía agua nos pusimos superultrahipermegacontentos y fuimos a palacio a contárselo todo a Miranda. Cuando llegamos el extraño gnomo nos abrió la puerta y nosotros entramos corriendo (bueno yo corriendo y Bruno volando) Al entrar en otra sala vimos a Miranda que estaba supe feliz luego se me acerco y me dijo que muchísimas gracias por salvar su reino y que siempre me estará agradecida. También felicito a Bruno y nos dijo que había organizado una fiesta en nuestro honor. Esa tarde, fue una tarde  de fiestas y celebraciones. Pero a mí lo que ahora me preocupaba era como podría volver a casa. Me acerque a Miranda y se lo pregunte ella me dijo que como llegue me podría marchar. Me dijo que volviera al lugar donde llegue al reino. Y volví con Bruno a ese lugar. Cuando llegue, me di cuenta de que en el suelo estaba la “R” entrelazada con la “P” como en la biblioteca del instituto. Me despedí de Bruno, me dirigí al símbolo y volví a pronunciar aquel poema.

CAPITULO 15:  Regreso a casa.
Cuando abrí los ojos estaba allí en la biblioteca, había vuelto a casa. De repente Elena entro en la biblioteca y, me vio allí. Elena me pregunto:
-¿Qué demonios estás haciendo aquí?
Yo le dije que estaba buscando un libro
-¿un libro? ¿Cuál?- me pregunto Elena
Si un libro es uno que se encontró un profesor y lo dejo aquí pero en realidad el libro es mío .Yo abrí el cristal y cogí el libro en el que leí lo del reino. Me lo guarde en la mochila y nos fuimos al patio. Luego regrese a casa y coloque el libro en mi estantería. Después cogí la foto de la fuente y la pegue en la pared con un trocito de celo. Después pensé en el reino de plata, en Bruno, en Miranda….y en todos los amigos que había conocido. También pensé que aquel reino era un lugar maravilloso. Entonces para no olvidarme de aquella super- aventura que solo yo había vivido, comencé a escribirla, y así lo hice.

Creado por: Stella.